martes, 21 de julio de 2009

NUEVAS POSIBILIDADES EN TRATAMIENTOS PARA LA ENFERMEDAD CELIACA

Estudios recientes sugieren la posibilidad de una mejora sustancial en la calidad de vida de los celíacos, ya que distintas posibilidades de terapia y tratamientos para la enfermedad están siendo evaluadas, con resultados prometedores en algunos casos.

Actualmente, el único tratamiento posible es la adopción de una dieta totalmente exenta de gluten. No es difícil imaginar, por lo tanto, que esta condición perjudique la vida personal y social de los portadores, puesto que el gluten está presente en gran parte de los productos alimentícios, cosméticos y fármacos.
Distintas líneas de investigación, sin embargo, podrán cambiar esta situación. Un artículo reciente publicado en la revista científica “Autoimmunity Reviews”, por el Dr. Aaron Lerner (Unidad de Gastroenterologia y Nutrición del Technion-Israel Institute of Technology), presenta una revisión amplia de estas posibilidades. Discutimos aquí algunas de ellas.





Manipulación del gluten Una de las líneas de investigación estudia la posibilidad de cambiar genéticamente algunas variedades de trigo para remover las fracciones tóxicas del gluten, o sea, aquellas responsables por la respuesta inflamatória existente en los portadores de la enfermedad celíaca. Aunque los primeros hallazgos en este sentido hayan sido positivos, este línea de investigación todavía presenta algunas dificultades, una vez que este cambio podría afectar las propiedades estructurales y viscosas del gluten, responsables por ejemplo por la elasticidad de la masa (panes, pastas). Esta dificultad, sumada a la oposición de algunos gobiernos y opinión pública al desarollo de variedades genéticamente modificadas, llevaron al relativo frenamiento de estos estudios.Por otra parte, algunos esfuerzos han sido hechos en la selección de cereales que naturalmente no contienen fracciones proteicas ‘tóxicas’, pero que al mismo tiempo tienen las propiedades elásticas necesarias a la producción de masas. Diversas estrategias fueron adoptadas en este sentido. Se ha constatado, por ejemplo, que un cereal conocido como Sorgo ,el cual contiene algunas propiedades necesarias para la preparación de masas, no generó reacciones perjudiciales en los grupos de celíacos estudiados. De hecho, aunque en Europa, Oceania y América el consumo de Sorgo no sea tradicional, en vários países de África y Ásia el ya es usado frecuentemente para la preparación de panes, bollos y otros productos.

Degradación del gluten a través del uso de enzimas


Otra línea de investigación estudia la posibilidad de ‘degradación’ del gluten (o sea, su ‘fraccionamiento’ en partículas pequeñas que no generarían la reacción inflamatória) a través del uso de enzimas. Uno de estos casos es de la enzima prolyl- endopeptidase: algunos estudios han evaluado si la adición de esta enzima en productos que contienen gluten de hecho puede reducir la respuesta inflamatória trás el consumo de estos productos por celíacos. Los hallazgos hasta el momento son prometedores, una vez que en algunos estudios la mayoria de los pacientes evaluados no desarollaron problemas de absorción de nutrientes ni respuestas adversas en un plazo de 2 semanas después del consumo de los productos con la enzima. Sin embargo, más estudios son necesarios para que sea posible garantizar la eficiencia y seguridad de estas técnicas.

Regulación de la ‘permeabilidad’ intestinal


Una de las hipóteses sobre las causas de la enfermedad celíaca y otras dolencias autoinmunes es la de que estas enfermedades estarían asociadas a alteraciones en la permeabilidad intestinal, o sea, en los mecanismos que controlan la apertura y cierre de de determinadas estructuras que actúan como barreras entre las células (responsables por impedir, por ejemplo, la entrada de macromoleculas, toxinas y otras bacterias en el organismo). Se ha señalado que, en el caso de los celíacos, la permeabilidad intestinal estaría aumentada en función de la mayor cantidad una proteína llamada ‘zonulina’ en la mucosa intestinal. En la presencia de demasiada zonulina, la barrera intestinal quedaría ‘abierta’ por más tiempo, permitiendo la entrada de partículas y residuos de la digestión los cuáles causarían la respuesta inflamatória observada en los celíacos. La compañía farmaceutica Alba Therapeutics estudia y desarolla la utilización de un fármaco, el AT-1001, lo cual inactivaría los efectos de la zonulina, manteniendo así la permeabilidad de la barrera intestinal intacta en la presencia del gluten. Los efectos del AT-1001 también serían ventajosos para otras dolencias autoinmunes, como el diabetes tipo I. La fase de testes 2b ya fué concluída. Según el Director de la compañía, los hallazgos serán anunciados en breve, pero el ya adelanta que fueron prometedores. Es posible así que muy pronto el AT-1001 esté disponible para comercialización.

Vacunas con ‘fracciones’ (fragmentos peptídicos) del gluten


Así como escribimos en otra notícia, actualmente se investiga la posibilidad de desarollo de una vacuna que permita a los de la enfermedad celíaca ingerir productos con gluten. El princípio de la vacuna sería gradualmente desensibilizar el portador a la presencia del gluten en su organismo, de forma que no genere la respuesta inflamatoria (o sea, esta sería una ‘inmunoterapia de desensibilización’, en la cual dosis cada vez más altas de los componentes tóxicos del gluten serían suministradas a través de vacunas). Esta posibilidad actualmente sigue en investigación


Introduccion de la tolerancia la gluten




Un estudio Europeo conducido en larga escala está testando los efectos de la introdución del gluten en la dieta de niños con alto riesgo de desarollar la enfermedad (por ejemplo por histórico familiar). El estudio - “Prevenir la Enfermedad Celíaca” (Prevent CD) - será llevado a cabo por 10 países europeos y participaran un total de 1000 niños, los cuáles serán acompañados hasta los 3 años de edad. Se estudiará la influencia de la historia dietética en la prevención de la enfermedad celíaca. La hipótesis es que si se suministran pequeñas cantidades de un alimento, el sistema inmune “aprende” a no responder ante esta sustancia. A este proceso se le llama “desensibilización” o “inducción de tolerancia”. Los primeros resultados podrán estar disponibles ya en 2010.


Otras posibilidades además de las citadas siguen siendo evaluadas, como la posibilidad de bloqueo de las sustancias (ej: enzimas) responsables por la respuesta inflamatória que ocurre en celíacos, y el desarollo de fármacos que permitirian la regeneración de la mucosa intestinal.


La enfermedad celíaca afecta hasta el 1% de la población de los países donde fué estudiada, y la adopción de una dieta completamente exenta de gluten no es fácil para muchos. Además, en algunos casos la adopción de la dieta no ocurre conjutamente con la mejora de los síntomas y las deficiencias nutricionales existentes. En un futuro cercano es posible así que alguna de estas terapias y tratamientos, o una combinación de ellos, sean cruciales para mejorar la calidad de vida de la población celíaca.